Compadres
Riiiing riiiing riiiing.
-Sí ¿diga?
-¿Pablo? ¡te habla Mariano!
-¡Anda, ya me preguntaba cuando ibas a llamar! ¿qué tal se siente saber que vas a seguir cuatro años más sin dar palo al agua?
-¡Joder macho, muy a gusto! muchas gracias tío, sin tu inestimable ayuda jamás habríamos ganado otra vez con tanta claridad, gracias por votar conmigo en la primera vuelta!
- De nada, tú sabes que nos retroalimentamos, aparentamos enfrentamientos pero al final somos la misma cosa, movilizamos la desconfianza, la insidia, el enfrentamiento de la gente y lo utilizamos magistralmente a nuestro favor, tú con el cuento de liberal y después eres más intervencionista que los soviéticos y cobras más impuestos que los noruegos, y nosotros con el cuento de que queremos más democracia ¡y mírame a mi como no dejo que se mueva ni una mosca sin mi permiso en mi feudo!!
-Sí, la verdad es que eres un hacha Pablo.
-Gracias , la verdad es que yo mismo estoy flipando de como de fácil manipulamos a estos pardillos!, mira primero dijimos que no éramos ni de izquierda ni de derechas, éramos anti casta, anti PP anti PSOE y anti IU, la verdad es que somos unos fenómenos macho, después que hicimos que Tania Sánchez se fuese de Izquierda Unida diezmando la circunscripción Rivas Vaciamadrid ¡vamos y nos juntamos con IU Nacional! Ja ja, somos unos fieras, y ahora yo soy admirador de Zapatero, mira que dije burradas del pobre, que era traidor, era el enemigo, la casta, y no sé cuantas cosas más dije, porque como sabes todos los días digo algo distinto. Oye a propósito de eso Mariano ¡cuidado que mañana digo que soy liberal y te dejo sin votos! Ja ja.
- Ja jaj, sí que eres un fiera.
- Nada, Mariano disfruta otros cuatro años, por favor deja secos a la gente así tengo caladero de votos, ok? Sigue con el tema de los sobres de estrangis, financiación por fuera y demás, tú sabes que a vosotros os sale a cuenta, no va nadie preso no dimite nadie y encima la gente os vota más, y de esa manera me devuelves el favor así puedo crecer más y al final cargarnos al PSOE. Ese es el objetivo.
-Eso está hecho Pablo, ¡sobre todo lo de los sobres ja ja! y lo de derogar derechos y sacar la policía a la calle a dar mamporros al que no le guste, y también le meteremos más caña a Cataluña, así fabricamos más independentistas y tú te los llevas al pozo, y así nos cargamos al PSOE en un pis pas. Pero oye no te hagas liberal mañana, ¿eh? que de verdad que me dejas sin votantes!! Eres un máquina Pablo.
- ¡Y tú, Mariano, y tú!
Good bye UK
Tras el éxito del Brexit ya temido antes de la desgraciada muerte de la política laborista Jo Cox y después descartado, la libra cae en picado, la bolsa se desinfla con una vertiginosidad alarmante, la prima de riesgo de cada nación de la UE se descontrola, pero todo eso, tarde o temprano se recuperará, es gestionable, Europa lo puede aguantar, e incluso puede y debe aprovechar la ocasión para confeccionar una unión renovada entre Estados que quieran permanecer, aportar y entiendan las ventajas de formar parte de un proyecto común, y de inmediato acometer las refacciones que pide a gritos el sentido común, como incentivar el gasto en lugar de aplacarlo, austeridad con respecto a la desmesura a la que se arribó con la burbuja inmobiliaria y bancaria, pero no austeridad en el consumo doméstico ni en el gasto social. Las queridas islas británicas que se las arreglen como puedan quieran, es momento de proceder con altura, sin revanchas absurdas, ni vehemencia tras el desplante recibido, sino coordinación, armonía, y sobre todo el catalejo puesto en el futuro con las referencias del pasado europeo. Trabajar junto al Reino Unido para que salgan lo más rápido y menos traumático posible para todos los actores en escena.
Cabe recordar que casi la mitad de los británicos no ha querido irse, es un número muy alto que se resiste a la tentación de la pasión inmediata, frente al descontento general por una Europa que ha olvidado en los últimos años a sus recursos humanos, son muchos los que han resistido a la cizaña de los grandes intereses contrarios a la unión continental, que han introducido exitosos elementos de desconfianza, y conquistado voluntades en su favor.
Lo más preocupante es la contagiosa sensación de desacuerdo que existe hoy en la mayoría de los Estados de Europa y en un número preocupante de ámbitos. Más aún que la desidia circundante, preocupa el deseo expreso de que la haya, la tendencia a la división, al rechazo del período más fértil del continente. Necesitamos romper el ciclo de saturación que sucede a todo modelo, y marcar la tendencia a su opuesto, porque la negación del progreso, el desarrollo y la paz, las generaciones actuales no la conocen, pero la Historia de Europa la conoce más que nadie sobre la faz del planeta. Ahora es cuando más esfuerzo hay que hacer en idear razones atractivas para las generaciones decepcionadas que han nacido dentro del período de bienestar social y progreso y sienten que se los ha abandonado últimamente, dando por sentada como un hecho natural la calidad de vida a la que se ha arribado, precisamente gracias a la concordia y la colaboración.
Ojalá que como individuos y como sociedad se sepa ver la diferencia entre la abulia y el desastre sin necesidad de atravesar por la experiencia para tomar partido.
En lo que respecta a los habitantes de esas islas que tanto apreciamos los anglófilos, aparte de sentir que nos abandone el mejor sentido del humor, los únicos que manejan por la izquierda, y de detestar la consiguiente suba de precio de las papas fritas de cebolla caramelizada y queso cheddar, lamento la decisión profundamente por todos los jóvenes que en su mayoría votaron por la permanencia sabiendo lo que significa para su educación y horizontes profesionales, incluso lo siento por las personas mayores que lo hicieron por una manipulada la nostalgia imperial de algo que nunca tuvieron (las mentes tienden a desear volver a edades en que las enfermedades y los desgastes físicos no estaban a tiro de piedra), a partir de hoy mismo comienzan un camino plagado de escollos, de problemas que deberán resolver de inmediato.
A menos de un día de la votación, Nigel Farage, el autor del discurso más duro contra la permanencia, acaba de comunicar que la promesa de invertir los más de trescientos millones de libras que semanalmente Reino Unido aportaba a la UE (pasando por alto lo que se recababa a cambio) en la que basó su campaña, no será posible cumplirla; los escoceses que votaron junto a Irlanda del Norte permanecer, ya están elevando sus voces, porque precisamente el argumento de mayor peso que esgrimió Westminster para que Escocia no se independizara del Reino Unido, era que de permaneciendo seguirían en Europa, y abandonando saldrían de la Unión.
Del recorte de derechos que ha sufrido la clase obrera y media británica, así como el resto de la europea en los últimos años, que es tan legítima como su enfado, se responsabiliza a los distintos tipos de inmigrantes que ciertamente Reino Unido debía más tarde o temprano gestionar, los que llegan con todos los derechos provenientes de la Common Wealth y de los países de la UE, además de la inmigración irregular. Aún admitiendo que el flujo migratorio hacia gran Bretaña es particularmente numeroso, y aún cuando un elector se sintiese atraído por utilizar los argumentos del Brexit elaborados con la mínima reflexión posible, debería apuntar más bien a las compañías y empresarios que contratan esa mano de obra tan atractiva por sus bajos costes. Pero siempre resulta menos azaroso y arriesgado, imaginar el éxito en una contienda si se emprende contra el enemigo más débil.
Por otro lado la movilización ciudadana hoy mismo ya ha presentado más de cien mil firmas como está estipulado en el Parlamento, y logrado que se analice y se discuta la posibilidad de volver a hacer el referéndum, aplicando un mínimo de 60% para hacer efectiva la opción de abandonar y condicionándolo a una participación no menor del 75% del electorado, aunque es poco probable que esto progrese, sí es cierto que los procesos parlamentarios que se abren a partir de hoy mismo, para encarar los nuemrosos cambios y sus procedimientos, serán muy complejos.
Hay curiosidad también por ver como queda distribuida la jerarquía administrativa, tanto en términos formales como en los más cotidianos, aspecto muy sensible en las islas, una vez desaparecida la UE como organismo supra nacional que facilitaba la percepción de integración entre cuatro sensibilidades culturales y nacionales, Inglaterra, Escocia, Irlanda del Norte y Gales, la percepción de estas décadas de compartir un espacio en concordia e igualdad de condiciones, en lugar de una relación de súbditos de tres naciones a los designios de una.
En todo caso los británicos deberán ahora resolver temas muchos más arduos que dejar a Europa, deberán acordar entre toda su gran diversidad, qué y como quieren ser, cosa de la que no se han tenido que ocupar en los últimos cuarenta años.
Un amigo dice que aparte de Estados Unidos, no conoce ninguna nación del mundo capaz de reinventarse sin primero autodestruirse, ojalá esta vez mi acertado amigo haya errado en el análisis.
Ilustres burros
Que la proverbial ignorancia que se instala en el hipotálamo de algunos americanos del norte, les lleve a pensar que España está cerca de Brasil, que América es un país y americanos su gentilicio o que a ese zurullo espantoso compuesto de berridos, golpes de tam tam, trompetazos al azar y estertores androides sobre una tarima encharcada de aguardiente se le llame cultura "latina", es algo que de tan repetitivo llegamos a ver con absoluta naturalidad.
Pero el colmo es que en España, país que participó activamente en la conquista del nuevo mundo, se llame "americano" al oriundo de Estados Unidos, desconociendo que tras la obra Mundus Novus se consideró a su autor, el italiano Amerigo Vespucci, hispanizado Américo Vespucio, como protagonista del descubrimiento de la nuevas tierras y a partir de ahí, se llama "América" todo el continente, desde Tierra del Fuego hasta Alaska, en honor a su nombre, y que por ende "americanos" son todos los naturales del continente, independientemente de si procede del Sur, Centro , Norte o Antillas
¿Sabemos que España no es un país fronterizo con Brasil? Por más que nos encantaría ir a Buzios cada fin de semana.
Pues por favor, quienes lo sepan, que también recuerden que no somos vecinos de Brasil, porque somos vecinos de Portugal y Francia, y esta a su vez de Italia y una parte de Bélgica valona y Suiza francesa e italiana, y que un poco más allá hay otro país más de lengua romance, en medio de los eslavos, Rumanía, y que todos nosotros formamos parte de las lenguas que descienden directamente del Latin, además de varios otros dialectos, y de no poco aportes cognados a las lenguas germánicas y algunos puntuales a las eslavas, y que dicho Latin es una lengua que aunque ya no use como idioma, sigue siendo una lengua viva en tanto es la divisa idiomática y cultural entre los países mediterráneos europeos, además de la lengua de las ciencias.
Por ende, dejemos que los "norteamericanos" llamen cultura latina a ese sub sector de súper exceso en la aplicación de la gomina líquida, collares y manillas de oro, aderezados con perfume almibarado de día y envuelto en una nube portadora de vahos de aguardiente de caña por la noche, por favor, españoles y "americanos", llamemos música latina a Verdi, a Rossini, a Scarlatti, incluso a Bach y hasta a Mozart antes de escribir la Flauta Mágica en alemán, y si quieren hasta a Bizet, Aznavour, De Falla y Paco de Lucía,
Mostrémonos todo lo burros que anhelemos parecer, pero por favor: en terrenos un poco más distantes a nuestra cultura de base.
Europa Gimme Shelter
Últimamente nos mostramos alarmados por la violencia creciente en los Estados Unidos, a raíz de los cada vez más frecuentes tiroteos en áreas públicas o excesos policiales.
Sin embargo observando la Eurocopa y la Copa América, debemos preocuparnos más, mucho más por Europa.
Si en el viejo continente se vendiesen ametralladoras, bazookas y fusiles de asalto como en EEUU en la Eurocopa no quedaría ni un hooligan europeo y también quedarían ya pocos marselleses con vida y casi ningún negocio sano en las ciudades de partidos calientes. Y es que ya rebasa las rivalidades futbolísticas, incluso las acostumbradas muestras de violencia en el entorno de ese curioso detonador de lo más soez de nuestra mala educación, que con frecuencia protagoniza y pone de relieve el fútbol y las pasiones intestinales que mueve.
La Eurocopa está siendo el reflejo de la desconfianza y el clima hostil que se está viviendo por una razón u otra en la mayoría de los países del área. El norte sospechando haraganería del sur, el sur inoculando en sus mal gobernados ciudadanos empobrecidos el rechazo al bárbaro explotador, los españoles contra los catalanes y viceversa, los escoceses contra los ingleses y ambos contra Europa, y toda Europa contra la inmigración, los eslavos echándole mata moscas a los refugiados, mientras latinos y germanos tampoco los acogen, con excepción de Alemania y Suecia. Grecia enojada con los teutones, los Tedescos contra España e Italia, el Islam contra toda la civilización europea, Schengen modifica fronteras con demasiada frecuencia, Francia y Bélgica colocan el ejército en las calles y la gente convive con ametralladoras. Crecen en todo el continente los atentos oyentes de los discursos neo nazis.
Nadie confía en nadie.
En cambio la Copa América se está desarrollando en el más sano, animoso y deportivo de los climas, tanto gracias a cada seleccionado nacional, sus representantes jugadores y los aficionados, así como a los organizadores y público nativo acogedor del evento a lo largo y ancho de los Estados Unidos.
Conviene tener presente que a lo largo de la Historia, siempre que Europa saturó sus períodos de paz y progreso y empezó a pensar en sangre y desolación, era de lejos el continente más desarrollado en todos los órdenes y desde Roma hasta el Tercer Reich, las personas acomodadas apostaban todo a nad,a a favor de que las señales de proximidad de alto conflicto se quedarían en únicamente algarabía del populacho enervado. Y siempre precedió a las mayores carnicerías humanas el mismo escepticismo, ya que los europeos son tranquilos y pacíficos hasta que se molestan en dejar de serlo, y no se toman esas molestias por menos de ciudades enteras arrasadas, poblaciones desaparecidas, razas diezmadas.
La novela Los hermanos Oppermann, escrita en los años del crecimiento del partido nazi en Alemania, en la cual su autor Lion Feuchtwanger, en un ejercicio de presagio y de sentido común excelso, ubica en la ficción más real a dos hermanos judíos integrados en la burguesía alemana, que sólo hablaban alemán, y que amaban a su país, en la disyuntiva de abandonar todo frente a la creciente amenaza de la Gestapo. A lo que uno de los hermanos responde razonando que era imposible que aquella muchedumbre progresase más allá de unas escaramuzas racistas, en el país de Beethoven y de Goethe, de Kant y Hegel. Incluso cuando estaba muriendo a manos de los nazis no lo terminaba de creer del todo.
Aunque la situación dista mucho ser aquella, sólo están ocurriendo deportaciones de gitanos arbitrarias, de africanos a países que nunca habian pisado, aglomeraciones de refugiados, casos aislados de agresiones de grupos nazis a extranjeros; en fin, sería impensable que la barbarie ascendiese más que al nivel de alguna altisonante algarabía pasajera.
Eurocomunistas y viejos hábitos
El eurocomunismo posterior a Berlinguer, que desembocó en Occhetto del PCI italiano y secundaron los franceses y otros europeos aggiornados, que se enfrentó a la URSS y rechazaron la dictadura del proletariado, soltó amarras con el conocido totalitarismo represor soviético, sobre todo porque en sus países , la opción autoritaria y tiránica ya estaba representada por las reminiscencias del sentir nazi y fascista. En las últimas décadas un partido comunista de ese orden en Europa Occidental es un eslabón más dentro de la cadena de la sociedad capitalista, con mayor o menor intervención del Estado según de que país se trate, pero generalmente con una fuerte presencia social demócrata, y funciona como órgano auditor de la gran patronal, como observador de la protección de los más desfavorecidos.
Más allá de lo meramente anecdótico no tiene nada que ver con lo que se conoce era el campo socialista y los países que aún continúan empecinados en soltar el poder detentado.
Siempre que reconozcan que su rol es meramente de oposición para ejercer un contrapeso de la libertad del mercado y los grandes capitales, cumplen una función social junto a otros partidos y movimientos progresistas. Sin embargo estos mismos partidos, aún cuando se muestren favorables a la democracia, en el poder encarnan un peligro que está siempre latente, ya que basan su teoría en un enfrentamiento, en un antagonismo, en odio de clases, no en su conciliación para el desarrollo, tomando partido por la clase baja, obrera y campesina, adoptando sus códigos, su envoltorio ético y estético, y al final terminan imponiendo a toda la población una cultura de la austeridad que deviene, en breve espacio de tiempo, en cultura de la uniformidad y de lo que es peor: de la miseria.
Ningún inversor audaz o innovador, encuentra motivación para la iniciativa privada dentro de sus marcos impositivos, de la estigmatización del beneficio y el crecimiento económico, y ello apresura las probabilidades de que los mejores cerebros, o bien hagan las maletas y emigren o caigan presos de la abulia y la desidia, y en cualquier caso esto detiene el desarrollo.
Por eso el comunismo, más allá de las intenciones, es un sistema perverso, porque al final sólo distribuye pobreza, y estigmatiza el deseo del confort, del hedonismo, de la frivolidad, el refinamiento burgués, causando el efecto contrario al deseado en la población: lo estimulan.
El caso de Italia es paradigmático porque en 1988 Occhetto, militante comunista de toda la vida, decidió disolver el Partido Comunista, y siendo próximo a las tesis socialdemócratas forma el Partido Democrático de la Izquierda, y más tarde termina siendo un destacado líder del ecologismo de izquierda.
Se puede decir que los comunistas de la Europa Occidental, no están en absoluto identidicados con represión y privaciones a escala nacional, en eso poca relación guardan con los marxistas leninistas o maoístas que promovían la dictadura del proletariado; aunque fácilmente se puede deducir que una vez en el poder, muy probablemente, de inmediato tomarían medidas de censura, calumnia, desprestigio, respecto de políticos, intelectuales y medios de comunicación hostiles.
Para poder llevar adelante un proyecto de igualar la calidad de vida por abajo, un gobierno comunista, por más tolerante que intentase mostrarse, terminaría entrometiéndose en la vida privada de cada individuo, en su cuenta bancaria, en el pensamiento, en su modo de vida, en los gustos e inclinaciones del ámbito íntimo, con mayor o menor ánimo de control.
La primera vez que engañan al crédulo el mentiroso es el culpable, la segunda vez el timador queda absuelto.
Oportunas coincidencias
Es curioso como funcionan los resortes publicitarios unidos a la manipulación permanente de la mass media sobre la muchedumbre de la zanahoria atada a sus narices.
En Madrid en Marzo del año 2011, una serie de bombas explotaron en diferentes vagones de trenes causando un espanto de muerte y horror entre la gente que acudía al trabajo. Esto sucedió con unas elecciones encima, a sólo tres días. Pues bien la situación era clara: si era terrorismo de ETA beneficiaba electoralmente al Partido Popular en el poder, y por ello pusieron toda la carne en el asador sin importarles lo más mínimo el curso de la verdad en informar que había sido la banda vasca; si era terrorismo islámico, más que favorecer a alguna opción en concreto, operaba en contra del PP y por ende desviaba el voto al único partido elegible para el poder entonces, el PSOE.
Resultó ser el terrorismo islámico, y el castigo al PP fue doble, por una parte el esperado por la noticia, y por otra parte y más fuerte aún por la manipulación del gobierno en las las pistas y los datos que indicaban claramente que no era el extremismo etarra.
Tras el reciente tiroteo ocurrido en Orlando, Florida, también ocurrido a las puertas de una histórica campaña electoral, de inmediato se planteó un dilema semejante: si se relacionaba el autor de los asesinatos en el club nocturno con el terrorismo islámico, el voto favorecería la posición islamofóbica del pre candidato Trump dado un extraño ronroneo paradójico del consciente colectivo, y si se conseguía relacionar más al solitario criminal, con su también probado fanatismo homofóbico y con la venta libre de armas de asalto, de ataque, de guerra, esto favorecería el discurso defendido desde el inicio por la actual Administración para favorecer una regulación de la venta de armas de grueso calibre.
Todavía no sabemos quien terminará llevándose el gato al pozo, depende de a quien se logre responsabilizar si no hay otra tragedia del estilo más cercano al día de las elecciones.
Hoy mismo, ante el reciente asesinato brutal en Gran Bretaña de la diputada Jo Cox en las vísperas del plebiscito por la salida de la Unión Europea conocida como el Brexit, de manos de un terrorista filo nazi, se vuelve a presentar una situación similar.
Si hubiese progresado el intento de presentar al asesino como un desequilibrado mental, tal como al principio apuntaron con sospechosa prisa los partidarios de la secesión, no correría peligro la ligera ventaja del voto de la separación. Sin embargo si terminaba siendo un extremista con una clara ideología de extrema derecha, como finalmente el propio terrorista proclamó, esto favorecería la inclinación de los ciudadanos moderados a votar en favor de permanecer en la Unión Europea.
Desde luego no hay nada que objetar, se trata de puras coincidencias.
Flores para Orlando
Al cabo de una masacre criminal, no hay nada peor que los asesinos, pero inmediatamente después están los manipuladores para sacar tajada de los asesinatos, como pasó a la hora siguiente de los 49 asesinatos y los 53 heridos en el club nocturno Pulse, en Orlando, Florida, cuando los extremistas amantes de la jauría de la guerra, dijeron que el atentado lo había organizado Daesh, con pistas más tibias que la hermana del peroné.
Hoy se sabe que el criminal sanguinario, llamó al 911 dando vivas a Hezbolá y a Daesh, nada que ver, un pastiche de efluvios etílicos, como si tras un asesinato alguien declarase que lo hizo en nombre de Barrabás y del malo de Popeye. A cada hora que pasa se va aclarando que era, primero que nada lo que ya se sabía: un violento homófobo, y luego en suma, lo que son la mayoría de los homófobos: un homosexual reprimido.
Aunque no tan reprimido, porque fue varias veces a ese mismo club, salía de allí beodo con frecuencia, y tenía en su terminal móvil una aplicación de citas gays.
En cuanto surgió la declaración de Daesh diciendo que se lo atribuían como se atribuyen todo lo que daña a Occidente, curiosamente, un público que jamás le creería una palabra a ningún musulmán ni siquiera moderado, en esta ocasión le creyeron con la velocidad de un rayo y a pies puntilla y sin revisar nada de los hechos, y por supuesto sin esperar las investigaciones del FBI.
Y lo más curioso es que este público tan crédulo frente a los divagues etílicos del asesino, no hayan reparado con carácter critico, ni siquiera tengan una opinión para el hecho de que el arma que acabó con la vida de esas pobres personas, y dejó heridas a tantas otras, la compró de venta corriente dos semanas antes, en una tienda de La Florida.
Más allá de que el Estado Islámico estén felices de atribuirse y de exaltar a este reprimido asesino amante de las armas de guerra y de las trancas de medianoche, más allá de que el extremismo islámico es un peligro permanente y una amenaza concreta, produce un profundo rechazo y desazón la prisa para intentar dos cosas, una, crear un ambiente propicio al odio al musulmán para fortalecer la posición xenófoba del candidato Trump a la vez que atacar al Presidente Obama por una presunta tibieza con los inmigrantes en general y los desdendencia árabe en particular.
Y la segunda, lanzar un globo sonda para auscultar el ambiente en favor de alguna nueva incursión o bombardeo que resulte atractivo para la industria armamentista.
Y es que el tema no trata de Republicanos vs. Demócratas, ya son numerosos los epublicanos de relevancia que han entrado en conflicto con Trump por sus actitudes alejadas de la éticas democrática y civilizada, desde el propio Jeff Bush que debió llamarle la atención y pedirle que se disculpase con su esposa de origen latinoamericano por sus declaraciones ofensivas con los inmigrantes, así como Mitt Romney Ted Cruz, Lindsey Graham, John McCain lo apoyó de mala gana criticando su actitud contra los inmigrantes, Marco Rubio, Lisa Bower, Eli Rubinstein, el propio presidente de la Cámara de Representantes Ryan rechazó la islamofobia del magnate. No se trata de republicanos, sino de Trump y el deseo de revivir una época dorada del imaginario colectivo sumado a la posibilidad de intentarlo con absoluta carencia de reflexión y sentido común.
Estados Unidos no es sólo el guardian de Estados Unidos, es junto a Francia el mayor valedor del mundo civilizado, el ejemplo de progreso y el garante del mundo libre.
Hechos como el sucedido en Orlando reafirman la fé y la convicción de los democrátas en que las sociedades civilizadas que día a día construímos, ante este dolor y esta afrenta, deben saber crecer en humanismo, en reflexión, en civismo, frente a la amenaza del oscurantismo.
Ryan rechaza el plan de Trump para prohibir la entrada de musulmanes al país
El presidente de la Cámara Baja, Paul Ryan, rechazó hoy el plan del virtual candidato de su partido a la Casa Blanca, Donald Trump, para prohibir temporalmente la entrada de musulmanes en el país a
http://www.elnuevoherald.com/noticias/elecciones/article83664027.html
Mi Borges
Yo leía a Borges mejor en tardes aciagas que plácidas, esas cargadas de calor húmedo aunque atenuadas por la brisa del mar habanera que todos querían soplar en la dirección opuesta, porque mi madre, aunque viviésemos en medio de esa locura de prohibiciones y alecciones, en esto fue tajante. Aunque no entrasen libros a Cuba de los mejores escritores clásicos ni de moda, a Borges y a Cortázar ella los tenía en casa y los defendía tanto como a los long plays que había debajo de a ese tocadiscos Sanyo de dos bafles. De vez en cuando citaba un verso, un pasaje de un cuento, de una novela, emitía una reflexión para que su hijo aplatanado recogiese reminiscencias de San Telmo. Mamá descionfiaba del Borges clasista que ella imaginaba del Alvear a la Biela, pero amaba todo lo que había escrito y fue eso lo que me llevó a leerlo por ósmosis. También lo del Alvear a La Biela.
Mamá se mostraba neo-peronista después de que mi viejo la dejase varada en La Habana con los tres pibes, para así contravenir a los Guevara de la isla, con mi abuelo en la cabeza, gorila de corazón "porque Perón era fascista" (como también repite este humilde servidor) y también porque hizo buenos amigos exiliados argentinos pertenecientes al peronismo de izquierda, que siguen y seguirán siéndole fieles más allá de la vida. Pero aún proveniendo de ese montículo de brea y sal que eran las apreciaciones de mamá entonces, me infundió cariño y respeto a ese hombre, que según ella me enseñó, al contrario de lo que los intelectuales argentinos de la izquierda de aquella época pensaban o propagaban, amaba y conocía profundamente el ser argentino.
En toda América y en Argentina en aquellos años en especial, se intentaba ubicar a Borges en las antípodas de la argentinidad merecida, de lo más granado y puro de la literatura sureña, del ser nacional. Buena parte por intereses espurios y otro tanto por desconocimiento, por haber trascendido su manifiesto deseo de morir en Suiza, su adoraración a las sagas nórdicas, porque impartió veinte años clases de literatura inglesa y norteamericana en la Universidad de Buenos Aires, por amar la poesía y la cultura inglesa, por saber tanto de filosofía sin ser filosofo, tanto de la grandeza y la miseria de la literatura germánica (y celta si vemos a los irlandeses Yeats y Joyce como celtas), y conocer tanto los intersticios guarecidos en que se refugia el guerrero frente a la desolación del desamor, saber tanto de la vida sin ser un vividor.
Por similares razones que a Victoria Ocampo y Bioy Casares, aunque a Bioy con su trabajo como administrador de un campo de los Casares le concedían el perdón a merced de ese aire pampeano recogido de su pariente Benito Lynch o aspirado de Mujica Laynez, que le bastaban para ser valedor de una Argentina, a la que perteneció, pero ni de lejos fue sobre la que más escribió. A Borges, se lo escoraba también por su "apoliticismo" sospechoso en tiempos en que los intelectuales "debían" adscribir y suscribir ideologías, declaraciones, pasquines, corrientes de liberación, y lanzar zarpazos coquetos con garra de clase media pro Mayo del sesenta y ocho francés, a una oligarquía extranjerizante, para lo cual paradójicamente se sirvieron más que nunca de los muy pampeanos Marx, Lenin, Freud, Lacan, Bretón, Aragón, Hernández el español, Luxemburgo, Althusser o Mallarmé, en lugar de las nutridas fuentes nacionales, con fuerte olor a alpargata de estanciero y peón.
Pero ni Borges ni Ocampo ni Bioy eran de clase media.
Cuando leí “La Intrusa” pensé ¿habrán leído a Borges?, todavía hoy no he encontrado un relato que me describa mejor al hombre de campo, al telúrico facón, los celos, al silencio, a la omertá autóctona, al viento, al caballo y al hombre con sus extremos, que ese corto y nutrido relato tan argentino.
¿Cómo no va a ser argentino de su época y de su clase si amaba el campo, el caballo, el héroe caído, el solitario, el gaucho, o al maula del tango, sobre el que tanto sabía? Describía una pelea a cuchillos como sólo pueden hacerlo los norteamericanos a partir de Mark Twain, ¿Cómo no va a ser argentino de primera fila si conocía la obra de Xul Solar, de Evaristo Carriego, Martínez Estrada, Macedonio Fernández, Baldomero Fernández Moreno, como nadie?
Si con todo lo que criticaba al idioma español hablado por los españoles, conocía Cervantes e interpretaba el Quijote dentro de la literatura hispánica y Universal, como ningún pacato de los que más tarde fueron más argentinos que el ombú y la fainá.
Fue la guinda del que probablemente haya sido el mejor pastel literario de América, la revista Sur, dirigida por Victoria Ocampo quien desde el primer número dejó claro a quienes iba dirigida:
“Waldo, en un sentido exacto, esta revista es su revista y la de todos los que me rodean y me rodearán en lo venidero. De los que han venido a América, de los que piensan en América y de los que son de América. De los que tienen la voluntad de comprendernos, y que nos ayudan tanto a comprendernos a nosotros mismos.”
Borges, además de haber encarnado al argentino de su clase en su imaginario, aportó a la literatura del mundo entero la magia de conocer su avatar inserto en una cultura preservada y escamoteada, en el remoto sur de los patagones. Fue uno de los mayores exponentes de la poesía y la narrativa del siglo XX para Occidente, admirado también en Oriente por su pasión por el pensamiento y la moraleja. Su sabiduría de viejo vizcacha, dejó que Atahualpa Yupanqui lo admirase como a un paisano, que Cortázar resumiese la nostalgia a su tierra en la lectura a Borges, que Mick Jagger se levantara de una cena para sentarse junto al maestro y decirle que era un honor conocerlo, a lo que el maestro le replicó con su habitual cortesía: -Ah usted es el autor de esa canción- la cual, cuenta Kodama que se la reveló tarareándosela, para sorpresa y orgullo del Stone.
Borges, Borges y Borges
todo lo demás es aprendizaje
Atahualpa habla de Borges
Hola mamá
Mi vieja falleció hace dos meses y medio.
Había ido a despedirla a su casa y entorno de La Habana donde residía, pero al final pasé la semana más ocupado en metabolizar la actitud de escaso decoro y nulo buen gusto de un pariente cercano.
Recién esta mañana me enteré de una manera integral, que mi madre ya no está en la vida, cuando desperté del sueño al que ella entró con una presencia más real y palpable que las cosas que habitualmente me rodean en la vigilia.
Aparecieron situaciones de complicidad. Fue la primera vivencia onírica de los últimos meses que no se cuenta como una pesadilla.
El escenario era cualquier país, o la mezcla de varios, y ora estábamos rodeados de unos que hablaban con unos ademanes y ora de otros, como es común en los sueños.
Regresábamos de haber hecho juntos un trabajo que había sido un éxito y ella partió a mitad las ganacias, a pesar de esa satisfacción había algo de pena, ambos estábamos de luto por mi abuela, su madre y en gran parte también la mía, quien en el sueño se había marchado recién, veinte años más tarde que en la realidad, cuando no pude ir a despedirla e imaginar por última vez sus dedos entre mi cabello. Entonces decidimos que viviríamos cerca.
Yo sentí que de todos lados me brotaban fuerzas como retoños y a ella la veía relajada.
Las miradas, las conversaciones, y la presencia era tan real que cuando desperté sentí un frío repentino, un empujón desde el borde de la acera hacia la calle por donde discurre el desamparo de la conciencia racional, me abracé a mi mismo un buen rato buscando perpetuar su olor, su mirada, su cercanía y al menos conseguí quedarme con la sonrisa. Recién ahí me di cuenta que se fue.
No sé donde está la vieja, pero está, hacía mucho tiempo que nuestra relación no era la viva imagen de una celebración, sin embargo al sueño acudieron sólo momentos tiernos. Así que, como dicen los creyentes, los caminos de la vida son inescrutables.
Mis sueños están abiertos mamuni.