Perón, el enemigo de la democracia
Perón fue un militar latinoamericano formado en el fascismo de Mussolini, amigo cercano de cada dictador golpista y genocida de su época.
En estas fotos se muestra, como era habitual, con lo mejor de cada casa: Trujillo, Somoza, Stroessner, Franco, Pinochet, López Rega, Debajo un artículo cuenta como lo pasaban Perón en la mansión dominicana del sanguinario dictador Trujillo, asesino de miles de haitianos, opositores, demócratas, con Batista recién escapado de Cuba. Esto tras ser el garante de los criminales de guerra alemanes recibidos con entusiasmo en suelo argentino, de modo similar, todo hay que decirlo, que en el resto de países del Cono Sur, con la honrosa excepción de Uruguay.
¿Qué hizo que el pueblo argentino se adscriba al peronismo más allá del siglo XX hasta el día de hoy?
Incluso siguen defendiendo a este fiel representante de los militares ultraderechistas latinoamericanos, ex militantes peronistas de izquierdas, décadas después de saber que había usado como un forro y luego traicionado a John William Cooke, a Héctor Cámpora, que más tarde destituyó a Ricardo Obregón Cano en Córdoba y a Oscar Bidegain en Buenos Aires, y que tras eso los echó de la Plaza de Mayo al grito de ¡Imberbes! Una v ez que ya no le servían, a partid de lo cual comenzó a perseguirlos y a eliminarlos de manera brutal, de la mano de López Rega y la Tripe A.
¿Qué tipo de locura esa esta, que hoy en 2022, quede la mitad de un país rindiéndole pleitesía a semejante espécimen, cuando de su propia época, en sus respectivos países, acaso queden tres o cuatro decenas de mussolinianos, hitlerianos, estalinistas, y ni un solo stroessneriano, batistiano ni somozista?
Pero además de la incomprendida pasión, por un fenómeno tan contrario a intereses de clase, lo idolatran desde un pretendido sector de izquierda, sin reparar que fue su mayor enemigo.
¿Será a merced de un poder superlativo u oculto de Perón, o de un déficit de la conciencia colectiva argentina en contraposición a su excelsa capacidad individual?
Bufones de palacio
La frase tan conocida para establecer una línea divisoria entre el periodismo audaz y los aduladores obsecuentes, que se le atribuye a Orwell “noticia es aquello que alguien no quiere que se publique. El resto son relaciones públicas”. no consta que sea suya, sin embargo esta sí: “La libertad de expresión es decir lo que la gente no quiere oír”. Aunque la frase que más aprecio en este sentido la escribió L.E.Edwardson, periodista del Chicago Herald:
“Cualquier cosa que un patrón quiera ver publicada es publicidad; cualquier cosa que no quiera ver en el periódico es noticia”
Viviendo en España y viendo lo cortesanos y serviles que son la justicia, el periodismo y la sociedad en general con el ex rey, aún después de saberse que ha cometido delitos que en cualquier país anglosajón lo llevarían ante una corte, me doy cuenta de donde proviene esa obsecuencia hiperbólica que recordamos del periodismo y la sociedad cubana con Guarapo, el monarca isleño.
Recuerdo que una vez el famoso obsecuente Randy, de la Mesa Redonda, en una rueda de prensa, permaneció de pie con una sonrisa congelada que le encendía de dolor cada músculo y tendón de la cara, tras hacer una pregunta al dios devorador de la barba babeada, que este respondía con interminables tartamudeos y disparates. Mientras Guarapo desentrañaba la madeja de dislates a los que su empastillamiento lo sometía, nadie se atrevía a dar descanso a la comisura de los labios en aquella sonrisa emblemática de la guataconería institucional.
Lo mismo, exactamente igual, ocurre con el ex rey español que se ha limpiado el orto, la poronga y los mocos con la confianza ciega y muy poco audaz de los españoles. Desde antes de conocerse todas las tropelías y delitos inimputables, a merced de una ley de impunidad que dejaba clara la obsecuencia extrema nacional a la figura del Midas Borbón, ya era frecuente que en cada recepción, los invitados nacionales se mostrasen con los hombros caídos, las manos sujetas delante, pasitos de mongólicos y sonrisa de heroinómanos, todos reían con cada imbecilidad que decía el nada ingenioso rey de entonces, recuerdo que incluso una vez, él debió aclarar, que lo que había dicho no era un chiste, instante a partir del cual, la incomodidad imperante no impidió la desvergüenza de cambiar de súbito el semblante, de risotada a rictus sepulcral.
Hoy, habiendo sido una persona que sin oficio ni beneficio era mantenida hasta en sus más suntuosos caprichos con el sudor de los verdaderos virtuosos, tras evadir impuestos sobre unas cantidades indecorosas de dinero obtenidas de modos nada ejemplares, lejos de interpelarlo, interrogarle al respecto, ni tan siquiera hacerle una observación; el periodismo español en masa, dejando claro que por un premio Pulitzer no está pujando, lo aborda para preguntarle:
-Su Majestad ¿cómo desayunó hoy, durmió bien, lo pasó bien con sus nietitos? ¡Ay que majo es!
Valle Inclán decía: "España es una deformación grotesca de la civilización europea". Creo que no todo el país es así, pero seguro que sí el periodismo, la gran empresa y la justicia de la península y de sus adorables vástagos americanos.
Los Randys ibéricos o la Herencia hispana en el Caribe
Hamburguesas, moteles y rock'n'roll en la 66
Estados Unidos.
Independencia de la monarquía antes que cualquier otro en América, democracia, abolición del esclavismo, empoderamiento y derechos del individuo, pioneros en ascenso y descenso social, voto, industria, literatura de las clases humildes, héroes analfabetos, western, misterio, thriller, acción, colt, winchester, remington, ragtime, Batman, Superman, Flash, Spiderman, el gordo y el flaco, los tres chiflados, Bugs Bunny, Mickey Mouse, Betty Boop, el Pato Donald y Huckleberry Hound.
Singer Sargent, Pollock, Mark Twain, Al Johnson, Scott Joplin, Jelly Roll Morton, Sacco y Vanzetti, Sinatra, Toro Sentado, Jerónimo, Grant, Custer, Al Capone, Martin Luther King, Lynch, Coppola, Scorsese, Ford, Chevrolet, Cadillac, GMC, locomotoras, trenes, camiones, buques, aviones, naves espaciales, satélites. Toda la telefonía desde Bell y la computación desde Apple y Microsoft.
Louis Armstrong Mahalia Jakson, Marilin Monroe, Kennedy, Max Roach, Bird, Miles davis, Elvis, Chuck Berry, Jerry Lee Lewis, Jim Thompson, Bukowski, Raymond Carver, Chandler , Hammet, Phillip Roth, Arthur Miller, Norman Mailer, Patricia Highsmith, Ella Fitzgerald, Janis Joplin, Billy Holliday, todo Hollywood, todo NY City Beatnik, todo San Francisco hippy, todo Oackland soul funky, todo el Blues de Mississippi, el de Chicago, el jazz de New Orleans y el rock'n'roll por toda la Highway 66.
Ganar pasta.
Blues jeans, zapatillas y guitarras eléctricas.
Costillas a la barbacoa, patas de cangrejo, camarones, hamburguesas en mil y una especialidad, pollo frito rebozado, fudge, cinamon rolls, coca cola, pepsi, fanta, seven up y criush, cafés interminables en Star"cunts" y refill en Panera Bread. Chicles y golosinas. Casinos y sus buffets libres baratísimos de familias sioux y apaches. Todo el verde la costa oeste y el espacio de la costa este, las nieves del centro, el desierto del sur, y el mar y el café y modo de vida cubano de Miami.
Estados Unidos sedujo más por toda esa sensación de accesibilidad para todos, que lo que conquistó con su imperialismo, que también blandió con no poca frecuencia.