" />
Overblog Todos los blogs Blogs principales Literatura, Historietas y Poesía
Edit post Seguir este blog Administration + Create my blog
MENU
Publicidad
El blog de martinguevara

Para bailar

6 Julio 2025 , Escrito por martinguevara Etiquetado en #Cuba Opinión, #Relax

Yo llegué a ser casi un cubano. Por supuesto con todo un pasado argentino más allá de mi propia existencia, con una familia muy emblemática de mi país de nacimiento, y no solo por el tío, sino escritores, premios nobel, descubridores-conquistadores, madre tanguera de San Telmo. Pero llegó el día que dije basta de extrañar Argentina porque no vamos a volver nunca, y me aplatané del tipo habanero que es jodedor, descarado, inventor, borrachín y pretencioso, la verdad sin falsa modestia, daba más manguera que el cuerpo central de bomberos; pero una de los rasgos más característicos del cubano nunca lo incorporé:

Soy tremendamente patón bailando casino, salsa o cualquier derivado o sucedáneo del son. También me pasa con el tango y el vals. Con la madre de mi hijo fui a tratar de aprender tango con una pareja de profesores excelentes Esther y Tomi, yo le decía a ella pero por qué bailas tan bien con Tomi y conmigo tan mal? El que la llevaba mal era yo. Ellos fueron los profesores de Madonna y Antonio Banderas cuando hicieron Evita ¡Ni siquiera con ellos!

Pertenezco a la generación de pepillos que escuchaban y bailaban rock, disco, funky y soul y solo iban a fiestas donde se pusiese esa música y que antes de la primera temporada del popularisimo porgrama "Para bailar" que concluyó con una batalla sobre la tarima entre dos parejas, los Santos con su perfección en el Casino y los Francis con su refinado rock'n'roll, ningun pepillo que se precisase osaba mover las caderas y hombros más allá de los golpes secos que Elvis bautizó. Pero eso no es más que una excusa lo único cierto es que todo mi ser está tremendamente reñido con cualquier baile acompasado, de movimientos coordinados con otra persona. En realidad me fallan bastante las habilidades sociales de coordinación en casi todos los terrenos, baile, deportes, trabajo, vida cotidiana, excepto en uno que por decoro y falsa modestia evitaré su mención. Incluso, al no mediar la ingesta de alcohol, todo lo gregario que puedo aparentar ser dura lo que un flato en un canasto.

 Y cuando tras una cena o un encuentro entre amigos o desconocidos alguien detiene la cháchara pone música y se arma la bachata, paso a sentirlo en el alma, y entonces me recrimino no haber interiorizado más a aquella maestra que en el ensayo antes del matutino, hacía tanto vacuo hincapié en que diese los pasos adecuados para no destrozar la hilera de la conga de los alumnos de mi aula.

Uno dos y tres, que paso más chévere, que paso más chévere, el de mi conga es.

 

Publicidad
Para bailar
Compartir este post
Repost0
Para estar informado de los últimos artículos, suscríbase:
Comentar este post